Regla de los 2 Días

Ey!

En este artículo te traigo otra regla interesante para mejorar la productividad personal. Hace unos días ya te hablé de la Regla de los 2 minutos, que nos ayuda a decidir sobre tareas cortas, que hacemos para liberarnos y poder enfocarnos mejor a las tareas importantes que tenemos.

En este caso, vas a ver la situación desde el punto de vista contrario, cuando fallas en hacer una tarea. Porque en muchas ocasiones quieres conseguir mejorar en un hábito y no consigues mantenerlo el tiempo y por lo tanto no llega a convertirse en un hábito. Esto se puede dar por muchas razones, a todos nos ocurre frecuentemente.

Y cuando fallamos en hacer esta tarea una vez, ya de repente nos cuesta el triple seguir en la línea que estábamos. Ahí es donde entra la Regla de los 2 Días.

¿Qué es la Regla de los 2 Días?

Es una sencilla norma que vas a utilizar a la hora de intentar adquirir un hábito. La primera vez que se lo escuché a alguien, fue a Matt D’Avella y la verdad que tiene mucho sentido.

Es muy simple y muy fácil de aplicar, además que ayuda a conseguir tus objetivos en el largo plazo.

La Regla es Simple: Nunca se puede dejar un hábito por 2 días seguidos. ¿Ya está?

Si.

Tan sencillo como eso. En vez de poner el foco en el primer día que fallas, tiene que ser en evitar por todo lo que puedas que falles un segundo día. Así conseguirás que este hábito no se esfume como lágrimas en la lluvia.

Esto es muy sencillo, cuando nos enfocamos en un día, puede que tengamos toda la fuerza de voluntad y que estemos consiguiéndolo, pero un día se puede fallar por mil motivos: Te encuentras mal, tienes mucho trabajo, tienes que estudiar, ha venido un familiar a verte, tus amigos han preparado una quedada de última hora y no te ha dado tiempo a cumplir con tu hábito… En fin muchas razones varias.

Por eso puedes fallar una vez, pero evitar a toda costa que sea dos días seguidos. Esto te da la tranquilidad de que vas a hacer tu tarea sin que tengas la presión de haber fracasado un día, porque eso nos desmotiva y hace que lo dejemos.

La fuerza de la Regla de los 2 Días

Sin duda, aunque es sencilla, nos da varias cosas:

• Flexibilidad. Si fallas, puedes volver a retomarlo sin sentirte culpable, estás dentro de «lo acordado contigo mismo».
• Consistencia: Aunque falles algún día, te da la consistencia de mantenerte en el tiempo.
• Fácil de implementar: Sólo tienes que concienciarte que puedes fallar una vez, pero no dos seguidas.
• ¡Somos humanos! Hay en muchas ocasiones que estás desmotivado, que aparecen compromisos, que tienes el día liado. Si consigues manejarlo adecuádamente, te permite cada ciertos días fallar una vez y seguir «enchufado» en mantener tu hábito.

¿Para qué tipo de hábito puedo implementarlo?

Esta regla vale para todo tipo de hábito a largo plazo

Conseguir adquirir un hábito

Los hábitos en muchas ocasiones son difíciles de cambiar, pero no imposible. Todo se puede cambiar y todo se puede mejorar, pero cómo lo afrontamos es lo que determina si somos capaces o no.

Los momentos de debilidad existen y hay veces que son más fuertes que los momentos que nos sentimos motivados, un pequeño respiro no te vendrá mal, siempre que te obligues a no dejar un hábito por dos días seguidos.

Estamos hablando de una carrera de larga distancia, no de un sprint, por lo que hay que tener claro que el conseguir la estabilidad en el tiempo de realizar la tarea que necesitemos, nos ayudará a ir integrando el hábito hasta tenerlo tan interiorizado que lo hagas de forma mecánica.